DON ECHAO PA'LANTE.

Hace tiempo conocí a un tipo particular. Nada fácil de encontrar, pero si alguna vez te cruzas con personas de este calibre sólo puedes sentir admiración por ellas. Optimista por naturaleza, de esos que hablas con él y te levanta la moral. Que parece que todo lo hace fácil. La palabra imposible no está en su vocabulario. Tiene una capacidad de adaptación a las circunstancias extraordinaria. Si hay que cambiar la forma trabajar se cambia, si ahora hay COVID, pues pa' lante que ya pasará. 

Su mejor virtud, y una lección que todos debiéramos aprender, es que nunca habla de lo que no sabe. Conocedor de sus limitaciones y de sus fortalezas a la perfección, las utiliza con una sabiduría de la que tal vez no es del todo consciente. 

Dirige su pequeño negocio con inteligencia y tenacidad. Aunque a veces aturrullado, siempre tiene clara la dirección a donde ir. En todo momento sabe la situación del negocio y su entorno. No le gustan los asuntos burocráticos, está convencido que algunos son absurdos, aunque sabe que los tiene que cumplir. Su cumplimiento lo delega sin ninguna dificultad, con una elevada confianza en el profesional elegido. 

Persona de palabra. Como se solía decir antaño, su palabra es una escritura, y lo es. En ese aspecto su compromiso es total y parece que luche contra la evolución de ciertas cosas en el tiempo. Tal vez por esto, detesta el engaño. Si se siente engañado su reacción es firme y tajante contra la persona que lo  engaña, no duda en decirlo claro y trazar una raya. 

Amigo de sus amigos como pocos. De espíritu y corazón noble. Deja profunda huella por dónde pasa. Tiene un código ético personal un tanto peculiar, basado en la justicia, el respeto y la buena fe. A personas de este tipo no se les puede defraudar. Y supongo que tampoco quebrantar su confianza, porque al darla toda, la contraprestación debe ser en igual medida.

Estudió poco. Por su personalidad y carácter, tiene la suerte, al contrario que la mayoría, entre los que me incluyo, que no le hace falta demasiada formación académica, porque puede suplir esa posible carencia con la fijación en una meta y dirigirse directamente hacia ella. Cuando se propone algo suele conseguirlo con aparente facilidad. Digo aparente porque en su estructura mental, de antemano, ya ha desarrollado la idea y ha analizado los pros y los contra. Una vez fijado el objetivo, avanza en dirección a él firme y sin titubeos. Por muchos adjetivos que busco no encuentro ninguno que pueda aglutinar sus características, la mejor definición que he encontrado es Don Echao Pa´lante.